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las rutas de Fernando Obregón
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El territorio de Cantabria está compuesto por 102 municipios. Todas las semanas iremos incluyendo en esta página web una nueva ruta, municipio a municipio. Puede haber incluso, algunas semanas en las que se incorporen más rutas. Todos los amantes de la naturaleza y de andar los caminos, por el monte o por los pueblos, dispondréis de una excepcional guía para conocer palmo a palmo Cantabria y sus gentes. Que os aproveche...

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| rutas para caminar por Cantabria - Argoños

| localización de Argoños en el mapa de Cantabria |
| click aquí o en la localización del municipio en el mapa para ver la ruta |

Mapa rutas en Argoños
ficha de la ruta en formato PDF (adobe acrobat)

| descripción de Argoños

Argoños está muy cerca de Santoña, en la zona más oriental de la vieja Merindad de Trasmiera, sobre una de las rías que se juntan para formar el gran estuario del Asón, la segunda bahía de Cantabria por sus dimensiones. Nos encontramos ante uno de los municipios más pequeños de Cantabria, tan sólo 5’5 kilómetros cuadrados y un solo pueblo, Argoños, con sus barrios de Ancillo, Cerecedas y Santiuste, y otros de menor entidad. Históricamente Argoños siempre fue por libre, no se integró en las Juntas de Trasmiera, sino que se incorporó a la Merindad en 1579 a la vez que Escalante y Puerto (Santoña), las tres como villas agregadas pero al margen de las cinco juntas en que se repartía este territorio. La Ría de Argoños y el monte Mijedo son los dos accidentes geográficos dignos de mención en un paisaje de suaves relieves cubiertos de praderías, algunas manchas de encinar o eucaliptal, y edificaciones más o menos dispersas cuyo número está creciendo últimamente de una manera alarmante. El fenómeno turístico y urbanístico no es nuevo en la comarca (recordemos Noja, Isla, Ajo, Somo...), pero sí reciente en Argoños, que ha experimentado un crecimiento urbano tan rápido como desafortunado. Uno de los aspectos más tristes de este proceso es la colonización cultural que lleva acarreada, y que se manifiesta claramente en la proliferación de chalecitos que imitan la tipología de los caseríos vascos y se adueñan del paisaje trasmerano, mientras la arquitectura popular cántabra languidece olvidada y abandonada. El que suscribe es un admirador de los caseríos vascos (los de verdad, no imitaciones malas), pero su sitio está en el Duranguesado, el Goiherri o el Baztán, no en la costa de Cantabria, de ahí que denunciemos esta irrespetuosa invasión arquitectónica.


Después de esta pincelada crítica, vamos a resumir los atractivos que se pueden descubrir en el privilegiado entorno natural de Argoños. Por supuesto son muchos y ya bastante conocidos en los alrededores: las playas de Noja y Berria, el sorprendente encinar del monte Buciero con sus impresionantes acantilados y sus faros, Santoña con su iglesia gótica de Santa María de Puerto y sus fuertes... Todos ellos, aunque muy próximos, quedan fuera del diminuto término municipal de Argoños; los distintos lugares de interés dentro del municipio
, que también los hay y son poco conocidos, se nombran en el siguiente apartado.

| rutas para caminar por Argoños

En realidad, el municipio de Argoños es tan pequeño y ha cambiado tanto en los últimos años con el auge de la construcción, que es difícil sugerir aquí rutas de senderismo, aunque sí hay lugares por los que podemos pasear para conocer los sitios más interesantes. Sin duda la zona más atractiva del pueblo y su entorno es la ría, integrada dentro de la Reserva Natural de las Marismas de Santoña y Noja. Para conocer el sector de la misma perteneciente a Argoños tenemos que acercarnos hasta el barrio de Ancillo, el que siempre ha estado más vinculado a la pesca, el marisqueo y la explotación de los demás recursos de la ría. Estos no sólo han sido los comestibles y gastronómicos, que son los que principalmente dan fama a este barrio (en particular las almejas), sino también la energía de las mareas, sabiamente aprovechada durante siglos en los estuarios de Cantabria y otras regiones del litoral atlántico europeo. En Ancillo se conserva uno de los mejores molinos de marea de Trasmiera, el molino de Jado, que en un futuro próximo será rehabilitado por el Ayuntamiento de Argoños, al cual hay que felicitar por esta iniciativa. Un poco más allá, de las aguas de la marisma emergen las ruinas de otro molino mucho más deteriorado y los restos del dique asociado al mismo, el cual retenía el agua en el nivel de la pleamar hasta el momento de la bajamar, que era cuando se aprovechaba la energía hidráulica producida por la liberación de ese volumen de agua para mover las ruedas del molino.


Otra posibilidad de pasear por la orilla de la ría, aunque sea por asfalto, es una carreteruca que sale del barrio de Santiuste y recorre la zona del Gromo, hasta salir a la "carretera de los puentes" (Cicero-Montehano-Santoña) a un kilómetro largo de la entrada de Santoña. Además de disfrutar de la contemplación de las marismas, con la inconfundible silueta cónica de Montehano al fondo, podremos ver casi al final del paseo un árbol singular, el eucalipto del Gromo, uno de los escasos ejemplares de esa especie no autóctona que ha llegado a viejo en Cantabria, puesto que habitualmente se talan en cuanto tienen un volumen maderable.


Finalmente la otra gran zona verde que hay que destacar en este municipio cada vez más densamente urbanizado es la ladera del monte Mijedo, cubierta en gran medida por eucaliptos, aunque en algunas zonas se conserva el encinar cantábrico característico de la costa trasmerana. Con poco más de 200 metros de altitud, esta montaña separa Argoños y Noja, cayendo su vertiente norte directamente sobre la mar, con la playa de Helgueras a sus pies. Al igual que El Cincho o El Buciero, este monte es un valioso reducto de naturalidad inseparable de las marismas y playas de su entorno, por lo que debería ser preservado del crecimiento urbano que ya lo está acosando en algunos puntos, principalmente en Helgueras. Click aquí para ver el mapa de las rutas por Argoños.

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